El roce en la piel me pide disculpas
por pasar de largo todas las burlas
por caer despacio en la madrugada
e insultar de nuevo con la luz apagada.
Apenas y se notan ya las cicatrices
que de cara al mundo ya ni existen,
pero la mente recorre cada raya clara
que penetra hacia el interior como arma cargada.
Te descubres serena por fuera
y llena de pasión frenada por dentro
y sin querer tenerlo en cuenta
adormeces tus sentimientos.
Se quiebran las venas
que mueven montañas,
aquellas que por la niebla
quedan totalmente despobladas.
Se acumula, intensamente,
la dulzura que asoma, obsesionada,
y sin mediar ni media palabra
hace que la nieve la deje bloqueada.
Entonces emerge desde el interior
aquel pequeño nanorobot
que, creado en la propia mente,
recorre, sin previo aviso,
cada parte de tu cuerpo
advirtiendo que aún están ahí
esas líneas, ahora mínimas,
que te iban a hacer tan feliz.
Ya sé que el tiempo no borra nada,
simplemente lo vuelve a escribir
pero lo escrito se queda guardado
en la memoria del sin vivir.
CLMS
©️ Catalina Laura Muñoz Serrano
15-12-2022
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